James Hetfield: Voz, guitarra rítmica.
Lars Ulrich: Batería.
Kirk Hammet: Guitarra principal.
Robert Trujillo: Bajo
Por fin
tenemos el décimo disco de estudio de nuestros hijos pródigos. Más de 8 años
han tenido que pasar, en los cuales nos aplacaron con unas caras b del Death Magnetic
muy flojillas y un engendro experimental llamado Lulú. También ha habido tiempo
para hacer surf, una película, tocar en el mismísimo Antártico... En fin, muy
prolíficos los chicos.
Respecto al disco, sensaciones divididas. La primera escucha me cagué en todos
sus muertos, otra vez volvían a hacer de las suyas y a engañarnos. Después de
escuchar Hardwired... y Moth Into Flame como adelantos, un servidor se
esperaba ese eterno retorno a las raíces que luego nunca llega. Otra vez un disco
larguísimo, con temas interminables. Y lo que es peor... pocos minutos que
podamos llamar thrash metal.
Pero el caso es que tras (mucho) tiempo de escuchas, descubrimos un disco con
ciertas virtudes. Como pros, un Hetfield rejuvenecido, en una forma
extraordinaria, con una voz que inyecta energía a cada corte, sabiendo entonar
y administrar muy bien sus registros, partiéndose el alma en cada tema. Ulrich
también mejor de lo habitual, parece que ha estado practicando con sus
cacharros y nos regala más doble pedal del habitual y una exquisita
coordinación con Hetfield y Trujillo. Éste último, por fin con cierta
relevancia y presencia en los temas. La producción es acertada, como ya lo
fuera para mí en el DM y lejos del experimento fallido de St Anger. Los
instrumentos suenan limpios y se distinguen como es debido, sin saturar el
sonido de forma innecesaria.
Como contras, lo ya mencionado respecto al concepto del disco: más largo y
ambicioso de lo deseado. También un bajón considerable en la inspiración de
Hammet, bastante flojo. Algunos temas no gustarán nada a los fans de siempre.
En cuanto a estilo, el disco no se asemeja a nada en concreto. Parece que han cogido influencias del
Load, Black Álbum, Kill Em All, AJFA, etc, con un sonido similar al DM pero
para mí más grave, crudo, oscuro.
Empezando
por Hardwired…, corte que sirvió de presentación y que da nombre al disco. Un
servidor casi se caga en los pantalones la primera vez que lo escuchó. Venga
ya, ¿Metallica volviendo a exprimir sus instrumentos como hace casi 30 años?
Pues sí! Tras un inicio de batería contundente y preciso de nuestro amado Lars,
aparece la rabia que llevan tantos años guardándose. Tres minutos y pico de
puro thrash y furia, con Lars por una vez ganándose el sueldo y pisando los
pedales a fondo, precisión milimétrica entre todos los componentes y un tempo y
una colección de riffs a los que ya no nos tenían acostumbrados. Hetfield
escupiendo rabia: We´re soo fuck!! Shit outta luck!! Todo ello con un
regustillo sonoro a Black Album. ¿Qué más se puede pedir? Lástima que la mejor
canción del disco sea la más corta.
Después de esta
lluvia de riffs, aparece Atlas, Rise! Otro de los cortes que nos retrotraen a
los buenos tiempos. Menos veloz que el anterior, es un medio tiempo pero con
pegada, con un Hetfield inmenso, con un riff principal y un estribillo muy
pegadizos. Tal vez baja un poco la intensidad en ciertos momentos y podrían
haber resuelto el tema mejor.
Now That
We´re Dead, empieza prometiendo muy poco, pareciendo uno de esos eternos medios
tiempos que se empeñan en componer. Y hasta cierto momento lo es, siendo el
empeño vocal de Hetfield lo único salvable. No es thrash ni se le asemeja, no
gustará en absoluto a los fans más acérrimos. Pero el caso es que tras varios
minutos de cierto tedio esconde unos riffs bastante aceptables y se empieza a
convertir en un tema complejo y bien estructurado, con cierto regustillo a Load
(en el bueno de los sentidos, que este disco también tuvo cosas buenas). Y
Lars, más sosegado, demuestra buen sentido del ritmo y variedad aporreando sus
cacharros.
Sirva el
anterior corte como descanso, para dar paso a Moth Into Flame, otra de las
bazas fuertes del álbum. Inicio machacón, muy prometedor, con una parte vocal
de Hetfield que en su estructura me recuerda a Blackened y da paso a un corte
rápido, nuevamente thrasher, con un estribillo muy pegadizo (A moth into the
flaaaame!!) y a nivel instrumental muy bien resuelta, otra vez con un Lars
bastante acertado y una buena colección de riffs y doble pedal para terminar.
Tras este
temazo, tenemos Dream No More, medio tiempo de corte pesado, lento, muy del
estilo de aquellos medios tiempos del Load/Reload. De hecho, hasta Hetfield entona
como en aquellos discos. A pesar de todas las críticas que recibieron en su
día, siguen atreviéndose a componer este tipo de canciones. Será que realmente
se sienten orgullosos, o que querían hacerle un pequeño homenaje en su 20º
aniversario (cómo pasa el tiempo), o… vaya usted a saber. Es curioso, en
ciertas partes la canción me recuerda a cuando escuchaba a Metallica con mi walkman
de cintas de casete y se me empezaban a acabar las pilas. La canción se volvía
lenta, muy lenta, pesada…
Para
sacudirnos el sopor, Halo On Fire, que sin ser tampoco un tema rápido al menos
es interesante. Combina buenas partes instrumentales con un Hetfield muy
expresivo, con mucho sentimiento. Es un tema oscuro, complejo y elaborado, me
recuerda al Unforgiven III del DM y muestra las cosas que también sabe hacer
esta banda cuando se sale del camino que se les exige, regalándonos algunos
riffs bastante decentes.
Y terminamos
el primer disco. Como aperitivo de lo que nos aguarda en el segundo disco,
empezamos con el redoble de batería solemne y casi militar de Confusion, que da
paso a otro de los cortes complejos y oscuros de este álbum. A destacar, que
una vez más, sin hacer grandes alardes, consiguen sacarse un medio tiempo
resultón, con una melodía principal muy pegadiza remarcando mucho los graves de
los instrumentos. Es lento, pero tiene pegada y agresividad. De esos temas que
no te harán saltar ni brincar en directo, pero que en casa o en el coche se
saborean muy bien, para escuchar muchas veces.
A
continuación, ManUNkind, realmente no aporta gran cosa. Me recuerda al King
Nothing del Load, pero bastante menos inspirado. Casi 7 minutos en los que no
encuentro mucho que destacar, excepto algunos riffs puntuales en la segunda
mitad de la canción.
Con Here
Comes Revenge, tenemos una canción elaborada y variada a lo largo de sus más de
7 minutos. Al igual que en otros temas mencionados del disco, se caracteriza
por esa atmósfera densa, oscura, que parece que Metallica ha querido darle a su
segundo CD, a diferencia del primero, más thrasher y clásico. Para mí, se
escucha igual de bien que Halo On Fire o Confusion, aunque comprendo que
ciertos fans más tradicionales a estas alturas del disco ya estén jurando en
arameo. Poco thrash tiene el disco, la verdad. El tema se salva por una última parte en la que nos
regalan una buena colección de solos e incluso algo de doble pedal, que aporta
algo más de vidilla.
Seguimos con
Am I Savage (que nada tiene que ver con Am I Evil, desgraciadamente). Otro de
los temas que tal vez no deberían haber incluido, o en todo caso, deberían
haberle dado otra pensada. Pesada, densa, lo poco salvable es la versatilidad
de Ulrich y, una vez más, las ganas de James.
Murder One,
homenaje al mítico Lemmy de Motorhead, banda que Metallica ha tenido como una
de sus referencias e inspiración. A destacar, más que el tema en sí, el vídeo
que la banda ha editado en su honor, en el que se recoge la vida, milagros y
excesos de este tipo inigualable en un formato muy, muy curioso. La canción
como tal, es un sentido homenaje a su ídolo, usando muchos guiños a la banda en la letra.
https://youtu.be/2Mkq6GFLIsk
Y para
cerrar, por fin, tralla de la buena con este Spit Out The Bone. Ante nosotros 7
minutos de thrash de principio a fin, con todos sus miembros dando el 100%,
tempo veloz, riffs endiablados y James poniendo el broche de oro a un gran
trabajo a nivel vocal a lo largo de todo el álbum. Deben hacerla fija en el
set-list sin dudarlo. Brutal,
diversión pura y dura para este cuarteto de cincuentones que siguen teniendo
alma de chavales. Aunque a veces el negocio mande. Aunque a veces se empeñen en
llevar la contraria a sus fans más fieles.
Bueno, cuando
dije para cerrar…me refería al doble álbum, ya que la versión de lujo incluye
un tercer CD con algunos directos y covers curiosas (incluyendo Remember
Tomorrow de nuestra querida doncella). Como apunte, decir que me habría gustado
que incluyeran Lords Of Summer como parte del disco, me parece imperdonable que
dejen una canción tan potente como un extra.
Animo a los
queridos colaboradores de este gran blog a que me den sus impresiones respecto
a este tercer CD de regalo. ¿Qué os ha parecido?
En resumen, un álbum que dará mucho que hablar, que será odiado y amado a partes iguales y que, en cualquier caso, nos regala 4 ó 5 temas que podrán engordar su dilatado directo. Una espera demasiado larga para el resultado obtenido (a un servidor le gustó más DM), pero siempre una buena noticia, una excusa para verles de gira y un álbum que disfrutaremos mucho.
Disco 1:
Hardwired 3:09
Atlas, Rise! 6:31
Now That
We're Dead 6:59
Moth into
Flame 5:50
Dream No
More 6:29
Halo on Fire 8:15
Disco 2:
Confusion 6:41
ManUNkind 6:55
Here Comes
Revenge 7:17
Am I Savage 6:29
Murder One 5:45
Spit Out the
Bone 7:09
Extra:
Lords of
Summer 8:21